lunes, 9 de noviembre de 2009

¿El aprendizaje es algo tan trivial que se puede observar y medir con base en unas simples preguntas a propósito de unos contenidos cualesquiera?

El aprendizaje Jamás podría ser trivial, es un tema muy importante y de interés de todos los tiempos. De ahí tantos pensadores han dedicado su tiempo en buscar la manera mas eficiente de aprender y por ende de enseñar. Ha sido motivo de múltiples debates, conferencias, teorías, congresos e incluso de decisiones políticas y económicas de todos los países.
Seria muy ingenuo creer que solo con observar y medir tendremos respuestas concretas, la educación, el aprendizaje y la enseñanza jamás serán estáticas, están en continuo cambio como en cambio están las sociedades, además lo que puede resultar eficaz para una persona o nación, no necesariamente resultara igual para otra persona o país. Las necesidades son individuales y de acuerdo a su contexto, aunque ahora ya podemos extendernos, es decir quitar fronteras, la globalización permite ir generalizando necesidades.
Medir estadísticamente hablando permite tener una visión mas concreta sobre los avances, ventajas, desventajas, fortalezas y debilidades de cada cambio y actitud que se asume, en este caso sobre el aprendizaje y así tomar nuevas decisiones o ajustar los programas educativos. Las pruebas Enlace, Excel I y II han permitido detectar fortalezas y debilidades que antes de esto no se conocían o no se habla de ellas.

¿Qué concepciones de aprendizaje nos parecen congruentes con el enfoque por competencias y porque?

Inicialmente consideré que la perspectiva conductista no parecía congruente con el enfoque por competencias, pero al darle una segunda leída, puedo considerar que todas las concepciones de aprendizaje que menciona Pepe Marqués son congruentes con el enfoque en cuestión.
Considero que para que se presente el aprendizaje en un individuo y este aprendizaje le proporcione ciertas competencias que le hacen resolver problemas de acuerdo a su contexto personal o social es necesario que pase por ciertas etapas de aprendizaje; uno desde mi experiencia es el de estimulo- respuesta (perspectiva conductista) que en todas las etapas del desarrollo (Piaget) funcionan muy bien, es decir si, da una respuesta esperada recibirá un estimulo, puede ser una calificación esperada, un premio, etc. En asignaturas donde es necesario memorizar o en las primeras etapas de desarrollo es muy eficaz esta forma de aprendizaje.
La teoría del procesamiento de la información nos explica que es un proceso a partir de las sensaciones y las percepciones que indiscutiblemente esta presente en todas las etapas del desarrollo mediante procesos internos inseparables e imparables, es decir, aun cuando dormimos estamos procesando, almacenando y entrelazando la información recibida por nuestros sentidos.
Piaget con su atinada teoría epistemológica (constructivismo) y del desarrollo que va ligada a todas las otras teorías de enseñanza aprendizaje como cimiento de toda construcción del proceso de E-A. Las etapas del desarrollo son tan irregulares en cada persona y en cada contexto, por eso cada día es una experiencia nueva en la vida de cada individuo, el ser humano es curioso por naturaleza, simplemente es inconcebible la vida sin el deseo de descubrir, de aprender o conocer “algo” por eso el aprendizaje por descubrimiento como lo describe Bruner ha venido a apoyar tanto el entendimiento del proceso de aprendizaje.
Por consiguiente el aprendizaje se convierte en significativo y cognitivista, estructurando y reestructurando lo primero con lo segundo sin parar, considerando que conforme el individuo crece, su motivación va cambiando, por lo tanto, su aprendizaje se expande como un red sin fin, organizando cada nueva estructura en un aprendizaje útil, nuevo, que se enriquece no solo con las experiencias individuales sino también todas aquellas vivencias grupales, ya que aun en un momento dado, un hecho o situación se vive diferente para cada persona, por lo tanto la forma de percibir y de integrar la información individualmente y después compartirla, enriquece el conocimiento de los otros como lo menciona la idea de Vigotski (socio-constructivismo)
Ser competente es un proceso por eso creo que si un joven que llega a nuestras aulas ha pasado por un proceso educativo familiar y escolar bien planeado y guiado, indiscutiblemente tendremos jóvenes al egresar de este nivel medio superior con grandes capacidades, habilidades y aptitudes desarrolladas, es decir, competente.
El cerebro es, por eso, la maquina biológica mas maravillosa. Solo tenemos que aprender ha usar toda su capacidad, todo un reto.

Generación 'ni-ni': ni estudia ni trabaja

Los jóvenes se enfrentan hoy al riesgo de un nivel de vida peor que el de sus padres - El 54% no tiene proyectos ni ilusión

Tan preparados y satisfechos con sus vidas, y tan vulnerables y perdidos, nuestros jóvenes se sienten presa fácil de la devastación laboral, pero no aciertan a vislumbrar una salida airosa, ni a combatir este estado de cosas. El dato asomaba hace poco, sin estrépito, entre los resultados de la última encuesta de Metroscopia: el 54% de los españoles situados entre los 18 y los 34 años dice no tener proyecto alguno por el que sentirse especialmente interesado o ilusionado. ¿Ha surgido una generación apática, desvitalizada, indolente, mecida en el confort familiar? Los sociólogos detectan la aparición de un modelo de actitud adolescente y juvenil: la de los ni-ni, caracterizada por el simultáneo rechazo a estudiar y a trabajar. "Ese comportamiento emergente es sintomático, ya que hasta ahora se sobrentendía que si no querías estudiar te ponías a trabajar. Me pregunto qué proyecto de futuro puede haber detrás de esta postura", señala Elena Rodríguez, socióloga del Instituto de la Juventud (INJUVE).
Algunos sociólogos detectan una atmósfera juvenil muy inflamable Economizan sus esfuerzos por miedo a la frustración
La incertidumbre se impone en el empleo y en la pareja
Sólo el 40% de los universitarios tiene una actividad acorde con sus estudios
Están predispuestos a aprovechar el momento, "aquí y ahora"
"La gente no tiene prisa en hacerse mayor", dice una voluntaria de ONG
La crisis ha venido a acentuar la incertidumbre en el seno de una generación que creció en un ámbito familiar de mejora continuada del nivel de vida y que ha sido confrontada al deterioro de las condiciones laborales: precariedad, infraempleo, mileurismo, no valoración de la formación. Las ventajas de ser joven en una sociedad más rica y tecnológica, más democrática y tolerante, contrastan con las dificultades crecientes para emanciparse y desarrollar un proyecto vital de futuro. Y es que nunca como hasta ahora, en siglos, se había hecho tan patente el riesgo de que la calidad de vida de los hijos de clase media sea inferior a la de los padres.
Ese temor ha empezado a extenderse, precisamente, entre la generación que de forma más abrumadora, siempre por encima del 80%, declara sentirse satisfecha con su vida. El virus del desánimo está minando la naturaleza vitalista y combativa de la gente joven aunque encontremos pruebas fehacientes individuales y colectivas de su consustancial espíritu de superación.
He aquí una muestra de resistencia a la adversidad extrema, junto a la prueba de cómo el discurso consumista ha resultado una trampa para tantos jóvenes audaces que creyeron en el maná crediticio y el crecimiento económico sin fin. "No podemos hacer frente a las hipotecas", resume Luis Doña, de 26 años, padre de una niña de 15 meses, presidente de la Asociación de Defensa de los Hipotecados, que pretende renegociar la deuda contraída con los bancos y recabar la ayuda de la Administración. Llevados por el entusiasmo de haber encontrado un empleo estable, como comercial de una multinacional, él y su compañera adquirieron hace cuatro años un crédito hipotecario de 180.000 euros a pagar en 30 años para comprar un piso. "Teníamos que abonar 800 euros al mes, pero es que ya estábamos pagando 600 de alquiler. Hace un año, de buenas a primeras, nos quedamos los dos sin trabajo y ya se nos ha agotado el paro. Hemos conseguido que el banco nos cobre únicamente los intereses de la deuda, pero es que son 560 euros al mes y no los tenemos, porque no nos sale nada. ¿Desmoralizados? Lo que estamos es desesperados y eso que nuestro caso no es tan dramático como el de otras familias que han sido desahuciadas, han tenido que refugiarse en casa de su madre o su suegra".
Eduardo Bericat, catedrático de Sociología de la Universidad de Sevilla, cree que la falta de ilusión hay que interpretarla, no tanto por los efectos de la crisis, como por el cambio cultural producido con anterioridad. "El modelo de vocación profesional que implicaba un proyecto vital de futuro y un destino final conocido, con sus esfuerzos y contraprestaciones, ha desaparecido. Ahora, la incertidumbre se impone en el trabajo y en la pareja y no está claro que la dedicación, el compromiso, el estudio o el título, vayan a tener su correspondiente compensación laboral y social", afirma. Si la pregunta clásica de nuestros padres y abuelos: "¿Y tú, que vas a ser?" pierde fundamento, se entiende mejor que los esfuerzos juveniles respondan, más que a la ilusión por un proyecto propio, al riesgo de quedar descartado. "Si no estudio, si no hago ese master...". Según el informe Eurydice, de la Unión Europea, sólo el 40% de los universitarios españoles tiene un trabajo acorde con sus estudios.
A los jóvenes no les resulta emocionalmente rentable comprometerse en un proyecto de vida definido porque piensan que estaría sometido a vaivenes continuos y que difícilmente llegaría a buen puerto. "Aplican la estrategia de flexibilizar los deseos y de restar compromisos; nada de esfuerzos exorbitantes cuando el beneficio no es seguro. Como el riesgo de frustración es grande, prefieren no descartar nada y definirse poco", explica Eduardo Bericat. A eso, hay que sumar un acusado pragmatismo -nuestros chicos son poco idealistas-, y lo que los expertos llaman el "presentismo", la reforzada predisposición a aprovechar el momento, "aquí y ahora", en cualquier ámbito de la vida cotidiana. De acuerdo con los estudiosos, esa actitud responde tanto a la sensación subjetiva de falta de perspectivas, como al hecho de que el alargamiento de la etapa juvenil invita a no desperdiciar "los mejores años de la vida" y a combinar el disfrute hedonista con la inversión en formación.
A falta de datos sobre el alcance del "síndrome ni-ni", el catedrático de Sociología de Sevilla explica que el pacto implícito entre el Estado, la familia y los jóvenes, pacto que compromete al primero a sufragar la educación y a la segunda a cargar con la manutención, alojamiento y ocio, hace creer a algunos jóvenes que en las actuales circunstancias pueden retrasar la toma de la responsabilidad. "Desarrollan una actitud nihilista porque no se les exige estar motivados, ni asumir responsabilidades y hay redes y paraguas sociales. En las convocatorias para cubrir plazas de becarios, me encuentro con aspirantes de treinta y tantos y hasta de cuarenta años, y lo curioso es que esos becarios se comportan como becarios. Es la profecía autocumplida. Si les llamas becarios y les pagas como tales terminarán convirtiéndose en becarios. Lo que me preocupa es la infantilización de la juventud", subraya.
"Los jóvenes de ahora no son capaces de arriesgar, son conservadores", constata Elena Rodríguez. ¿La tardía emancipación juvenil española (bastante por encima de los 30 años de media) es, sobre todo, fruto de la inestabilidad y precariedad del mercado laboral o consecuencia de ese supuesto conservadurismo? Aunque la diversidad y pluralidad de la juventud aconseja huir de las visiones unívocas, no se puede perder de vista que ellos no han tenido que vencer los obstáculos de las generaciones precedentes. "Miramos con descrédito la vida que nos ofrece la sociedad. Nuestros padres trabajaron mucho y se hipotecaron de por vida, pero tampoco les hemos visto muy felices. No es eso lo que queremos. La gente tiene pocas prisas para hacerse mayor", explica Letizia Tierra, voluntaria de una ONG. Por lo general, las personas que trabajan en asociaciones de ayuda juvenil tienden a repartir sus juicios con la medida de la botella medio llena, medio vacía.
"En el CIMO (Centro de Iniciativas de la Juventud) vemos apatía y falta de ilusión generalizada. Muchos de los 200.000 nuevos titulados universitarios anuales afrontan con pesimismo la búsqueda de empleo. Saben que hay un elevado porcentaje de puestos de cajeros, reponedores, almacenistas, dependientes, etcétera ocupados por diplomados o licenciados", afirma Yolanda Rivero, directora de esa asociación que atiende a diario a más de 600 jóvenes. Con todo, descubre también a muchos jóvenes capaces de adaptarse y de asumir retos y riesgos. "La generación JASP (jóvenes sobradamente preparados) tiene la ventaja de su mayor formación. A la vista del panorama, continúan formándose, viajan, trabajan, de camarero, si es preciso, para pagarse un master y aprovechan sus oportunidades, aunque, eso sí, en casa de papá y mamá hasta los 35 años, por lo menos".
El catedrático de Psicología Social Federico Javaloy, autor del estudio-encuesta de 2007, Bienestar y felicidad de la juventud española, cree probado que nuestros jóvenes no son apáticos y desilusionados, aunque lo estén, por contagio ambiental. "Lo que pasa es que rechazan el menú laboral que les ofrecemos. El fallo es nuestro, de nuestra educación y nuestros medios de comunicación", sostiene. Aunque las ONG encauzan en España las inquietudes que los partidos políticos son incapaces de acoger, tampoco puede decirse que la participación juvenil en ese campo sea extraordinaria. "Algo menos del 10% de los jóvenes participa en algún tipo de asociación, deportivas, en su mayoría, pero el porcentaje que lo hace en las ONG no llegará, seguramente, al 1%", indica el catedrático de Sociología de la UNED, José Félix Tezanos. Autor del estudio Juventud y exclusión social, Tezanos detecta entre los jóvenes una atmósfera depresiva, un proceso de disociación individualista, condensado en la expresión "sólo soy parte de mí mismo" y el debilitamiento de la familia. "Se está produciendo una gran quiebra cultural. Los componentes identitarios de los jóvenes no son ya las ideas, el trabajo, la clase social, la religión o la familia, sino los gustos y aficiones y la pertenencia a la misma generación y al mismo género; es decir: elementos microespaciales, laxos y efímeros", subraya.
El sociólogo de la UNED se pregunta hasta cuándo aguantará el colchón familiar español y qué pasará cuando se jubilen los padres que tienen a sus hijos viviendo en casa. A su juicio, el previsible declive de la clase media, la falta de trabajos cualificados -"el bedel de mi facultad es ingeniero", indica-, el becarismo rampante, la baja natalidad y el desfase en gasto social respecto a Europa están creando una atmósfera inflamable que abre la posibilidad de estallidos similares a los de Grecia o Francia. "Podemos asistir al primer proceso masivo de descenso social desde los tiempos de la Revolución francesa", augura.
Más apocalíptico se manifiesta Alain Touraine en el prólogo del libro de José Félix Tezanos. "Nuestra sociedad no tiene mucha confianza en el porvenir puesto que excluye a aquellos que representan el futuro" (...) "Se piensa que los jóvenes van a vivir peor que sus padres", escribe el intelectual francés. Y añade: "Avanzamos hacia una sociedad de extranjeros a nuestra propia sociedad" (...) "Si hay una tendencia fuerte, es que tendremos un mundo de esclavos libres, por un lado, y a un mundo de tecnócratas, por otro" (...) "Los jóvenes tienen que trabajar de manera tan competitiva, que se acaban rompiendo (...) No están sólo desorientados, es que, en realidad, no hay pistas, no hay camino, no hay derecha, izquierda, adelante, detrás".
Nadie parece saber, en efecto, con qué se sustituirá la vieja ecuación de la formación-trabajo-estatus estable, si, como pregonan estos sociólogos, la educación en la cultura del esfuerzo toca a su fin y gran parte de los empleos apenas darán para malvivir. Aunque estamos ante una generación pragmática que no ha soñado con cambiar el mundo, muchos estudiosos creen que la juventud no permitirá, sin lucha, la desaparición de la clase media. "El mundo que alumbró la Ilustración, la Revolución francesa y la Revolución industrial está agotado. La superproducción y la superabundancia material en estructuras de gran desigualad social carecen de sentido, hay que repensar muchas cosas, construir otra sociedad", afirma Eduardo Bericat.
Las dinámicas encaminadas a establecer nuevas formas de relaciones personales, la búsqueda de una mayor solidaridad y espiritualidad, más allá de los partidos y religiones convencionales, los intentos de combatir la crisis y de conciliar trabajo y familia, el ecologismo y hasta el nihilismo denotan, a su juicio, que algo se mueve en las entretelas de esa generación. "Son alternativas que, aisladamente, pueden resultar peregrinas, pero que, en conjunto, marcan la búsqueda de un nuevo modelo de sociedad", dice el profesor. ¿Será posible que esta juventud supuestamente acomodaticia y refractaria a la utopía sea la llamada a abrir nuevos caminos?

domingo, 11 de octubre de 2009

"Mi confrontacion con la docencia"

Mi trabajo docente es un tanto diferente, mi trabajo es en el departamento de orientación educativa y vocacional, solo estoy con cada grupo una vez a la semana, tengo actualmente 17 grupos. Brindo un servicio que apoya de manera integral el proceso educativo que esta vinculado con alumnos, docentes, autoridades del plantel y padres o tutores de familia. Con cada figura existe un objetivo a lograr y aun cuando todos son importantes, en base a los objetivos mi prioridad esta centrada en el alumno, en este caso mi función es integrar al alumno al nuevo sistema, fomentar su autonomía, su capacidad de aprendizaje, promover el estudio, fortalecer constantemente sus valores, guiarlo hacia la toma de decisiones sobre su futuro académico, laboral y social, así como brindarle asesoría individual o grupal según sea el caso o situación.
Por supuesto que también al igual que todos los docentes sigo un programa especifico de actividades para cada semestre y en conjunto con las otras orientadoras del plantel elaboramos un plan de trabajo a lograr en el semestre, sin embargo no aplicamos examen.
También trabajo con los profesores para detectar situaciones especificas con los alumnos, como son; falta de interés, inasistencias, bajo aprovechamiento, disciplina entre otros. A los padres de familia les informo sobre el aprovechamiento de sus hijos y sobre los problemas específicos. Es decir mi trabajo consiste en trabajar conjuntamente con profesores, directivos, padres de familia y alumnos, para implementar acciones correctivas y preventivas con el objetivo de llevar al estudiante al buen termino de su preparatoria.
Todo lo anterior debo registrarlo, en una bitácora, elaborar reportes mensuales, integrar el expediente de cada alumno y de cada grupo. Organizar y atender actividades de vinculación con distintas universidades. Apoyar en actividades con alumnos desfasados y en examen de titulo, organizar y atender escuela de padres.
Frente a grupo llevo a cabo el plan de trabajo de acuerdo al programa y semestre en el que me encuentre. Primer y segundo semestre esta enfocado a técnica de estudio, motivación e integración al sistema y al grupo, de tercero a sexto semestre el programa se enfoca al área vocacional.
Tengo días muy dinámico otros mas tranquilos, pero todos los días surge un aprendizaje nuevo, los alumnos me llenan de vitalidad, de entusiasmo, me obligan al auto aprendizaje, a la investigación y a la actualización constante.
Estoy en el lugar y momento correcto, me gusta lo que hago y siempre trato de hacer lo que me corresponde de la mejor manera, pero esto solo mis compañeros, alumnos y directivos lo pueden confirmar o negar.

"Mi aventura de ser docente"

Durante el primer modulo reflexione mis propias vivencias, que por supuesto en estos recuerdos esta presente el miedo a equivocarme, a no tener una respuesta, a no tener material suficiente. Ahora puedo decir que todo ello me fortaleció, me dio seguridad, pero también recuerdo que algún día alguien me dijo "siempre hay alguien que sabe mas que tu y siempre habrá alguien que sabe menos que tu", esto me ha permitido, aceptar que cuando no tengo una respuesta, simplemente lo digo, "eso que preguntas no lo se, pero te invito a que investiguemos y podamos responderlo la próxima clase". La clase de orientación se presta para preguntar cualquier duda, sobre cualquier tema. Esto me ha permitido ser humilde y enseñar que aun como docente y como psicóloga, no todo lo conozco, pero que podemos investigar y aprender juntos, y así a sido, aprendo todos los días, me actualizo constantemente, a la velocidad de cada generación, de cada alumno.
Realmente estoy muy satisfecha con el trabajo que hago, pero también creo que puedo hacerlo mejor.
Estoy segura que el mayor reto de todo docente es lograr que el estudiante despierte la chispa de la curiosidad, la necesidad de saber, la sed de aprender, cuando esta flamita se enciende, nunca se apaga.
A mi me toca, como a muchos docentes, que los alumnos también lloren en mi hombro y que sigan adelante en su vida por algún tema que expuse o dije y les movió algo dentro de su ser, la forma de ver, la importancia de levantarse y volverse a levantar ante los errores, equivocaciones o problemas personales. Cuando logran seguir adelante, me llena de satisfacción.
Mi profesión me ha permitido desde un inicio, manejar muchas dinámica, identificar los distintos aprendizajes; el dialogo que mas resultado me ha dado es hablar en primera persona, por ejemplo, en lugar de decir "recuerden que es su responsabilidad" digo, "escucha, mira, escribe, pon atención, etc." También utilizar técnica para los distintos aprendizajes (visuales, auditivas, kinestesica, verbal), me ha sido muy útil para que los alumnos centren su atención hacia donde me interesa (el objetivo a lograr). Claro que una cosa es conocer las técnica y otra manejarlas y aplicarlas en el momento, con el grupo y los alumnos adecuados, el tiempo me sigue mostrando el camino.
Tengo mucho que decir, creo que habrá oportunidad, lo que si es cierto es que esta lectura me permite poner en claro todo el proceso por el cual he pasado y estar donde estoy.

sábado, 10 de octubre de 2009

"LO QUE SABEN MIS ESTUDIANTES"

Aplique una encuesta a 30 estudiantes (10 de primero, 10 de tercero y 10 de quinto semestre), para conocer los usos que le dan a Internet.

Los resultados mas sobresalientes son:
  • 28 alumnos para obtener música.
  • 26 como espacio de comunicación.
  • 25 para obtener información.
  • 24 para ver vídeos.
  • 23 como espacio de trabajo y para obtener fotos.
  • 9 para jugar
  • 1 para aprender ingles.

Como puedes observar, lo mas sobresaliente para mi fue que un alumno también lo utiliza para aprender ingles y aun cuando fue uno de 30 estudiantes, esto me indica que se le esta dando un uso de desarrollo personal y no solo para jugar como erróneamente yo pensaba, ya que de 30 solo 9 lo usan para este fin.


Los alumnos de tercer semestre comentan que pueden enseñarle a sus compañeros de primero a:
• Usar el teclado sin Mouse.
• Descargar programas
• Hacer vídeos
• Vacunar dispositivos
• Usar y hacer respaldos.
• Hacer gráficos
• Los insumos
• Meterse a Messenger
• Como usar la hoja de calculo de Excel
• Modificar fotografías, foto shop
• Usar el programa de movie maker
• Usar auto CAD
• Instalar todo tipo de programas
Formatear diskette, USB
• Usar Power point
• Dibujar en Paint.
• Decorar my space
• Como configurar la maquina
• Modificar un documento.

A los compañeros de su grupo: Les ayudan con los programas que están viendo, que es usar y hacer respaldos, en este momento y en todo lo que le pueden ayudar a los de primero, también a sus compañeros de clase.
Los alumnos de tercero se comprometen a asesorar a sus compañeros para cumplir con todos los objetivos de la materia de informática y pasar la materia todo el grupo, no dejar que nadie repruebe ayudándose entre ellos.
Esto lo verificare constantemente con la maestra y al final del parcial con su calificación.